«JAMAS SE SABRAN CON EXACTITUD EL NUMERO DE FALLECIDOS EN DERRUMBE DE LA MINA BULLA LOCA»

Por William Flores

Las zonas mineras en el Estado Bolívar se han convertido en el camposanto de Miles de venezola-nos que buscando un mejor porvenir y que se niegan a dejar su tierra y a sus familiares prefieren internarse en la inhóspita selva guayanesa, una vez más la muerte se hace presente en esa zona y en esta oportunidad un derrumbe en la mina Bulla Loca en la zona minera de La Paragua en el Es-tado Bolívar, deja un número considerable de fallecidos se habla de casi 100 los fallecidos, aunque la autoridades afirman unos que solo son 2, otros que son 14 pero la cifra real la conocen los fami-liares, habitantes y trabajadores del sitio de la tragedia quienes afirman que el gobierno miente al dar unas cifras mínimas en comparación al número real, conociendo como conozco la vida en las minas estoy seguro que jamás se sabrán con exactitud el número de fallecidos, muchos de los que están allí tapiados son personas indocumentadas, sin familiares, ermitaños, personas que se tras-ladaron allí atraídos por la bulla pero que sus familiares los hacen en otro lugar y muchos solicita-dos por los órganos policiales pero al fin de cuentas son seres humanos y muchos de ellos serán sepultados en fosas comunes en algún lugar de esa intrincada selva, el año pasado fue en la zona minera de El Callao dónde las torrenciales aguas del rio Yuruari arrastraron un sin número de mine-ros que se encontraban en unas galerías esta fecha aún continúan apareciendo restos humanos a lo largo y ancho de las Riberas del rio, hoy la muerte vuelve hacer acto de presencia y se lleva con-sigo a muchos padres y madres de familia que esperanzados que la suerte los iba acompañar en las profundidades de esa tierra, se sumergieron allí con una sola idea fija en su cabeza, conseguir el oro para enviarle a sus familiares, a sus hijos y ayudarlos a solventar los problemas económicos y alimenticios que agobian a muchos de sus familiares, hoy sábado 24 a 6 días de la tragedia, las labores de rescate por parte de la misma población continúan, una manada de zamuros sobrevue-lan el sitio del derrumbe lo que hace presumir la presencia de cadáveres que aún permanecen allí bajo el lodo y el barro, pareciera que la muerte nos persigue a todos y cada uno de los venezolanos dónde quiera que vayamos a buscar un mejor porvenir para nuestros seres queridos!

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