¡VIVA VENEZUELA!

El presidente Nicolás Maduro Moros, no da puntada sin dedal, parece que tiene ojos en todas partes y ni se diga oídos, o es que la red de amigos cooperantes si da resultado. Bueno, ojo pelao; es su estratagema tiene a todos los involucrados corriendo con las manos en la cabeza. ¿Qué hacemos? ¡Dios mío! Nada mejor para consolidar y proteger a los cultores, su labor y el patrimonio cultural.
Damas y Caballeros…Viva Venezuela… la Misión obliga a poner la lupa en un Plan Operativo Cultural Anual, que nadie conoce y que pocos beneficios tributa al Estado Bolívar, ya que las organizaciones culturales, colectivos, movimientos, cultores, o como quieran llamar, trabajan como pueden porque aman lo que hacen. La satisfacción del logro, las metas alcanzadas y los sueños cumplidos, son el valor agregado que cada cultor le da a esa labor que día a día le da una excusa para seguir haciendo cultura. ¡Viva Venezuela! Ese debe ser nuestro compromiso, por eso, rendirnos, jamás.
Con 8 eje muy puntuales, fríamente calculado, sin dejar arista excluida y pronta a iniciar el censo de quienes dan la vida por la cultura, toca nudos comprometedores, haciendo que la responsabilidad y compromiso para la consolidación y la protección del hecho cultural se garantice. Es decir, hay que apoyar.

Centro de las Artes de Ciudad Bolívar… cambiemos la historia
Uno de los ejes, de esta iniciativa presidencial, es la salvaguarda del patrimonio cultural. Si ese patrimonio, que en nuestro caso, el estado Bolívar, está en detrimento. ¿Cuál patrimonio? ¿Qué patrimonio? ¿Dónde está la esfera azul del maestro Soto? ¡Auxilio! sálvese quien pueda.
Tal y como expresó el cronista cultural Ivo Farfán, en sus redes sociales “tanto esfuerzo e inversión económica” para recuperar la infraestructura original, en historia, en obras de artes, el Centro de las Artes, como un espacio de encuentro de todas las especialidades artísticas, hoy está en desidia, abandono y en medio de un dilema, del cual ningún jurisconsulto ha encontrado solución. ¿No hay solución? Nos imaginamos que sí las partes no cumplen lo que reza el documento rector, debe fenecer el compromiso. Aunque eso incurra en alguna sanción pecuniaria. Ninguna de las partes cumplió. Entonces ¿qué vamos a hacer?
Dejen de soñar y pongan el punto en la ”i” para solventar esta situación que tanto duele a los que hacemos vida en ésta Ciudad. Porque como bolivarenses no nos importa quién intervino en la recuperación de la infraestructura, ni qué gestión gubernamental no quiso invertir para continuar con su mantenimiento, guarda y custodia. Nada de eso nos importa, lo que sí importa y nos duele, la infraestructura, las obras de artes que reposaban en esos espacios, que en la actualidad desconocemos en qué condiciones se encuentran, en qué lugar se resguardan (si es que existen), si están en buenas condiciones o simplemente… esto último se lo dejamos a su imaginación.

Por último, pero no menos importante: Manuel Piar, héroe de Guayana
Próximo a celebrarse un nuevo aniversario del natalicio del Libertador de Guayana, Manuel Piar (1774-1817) y como una forma de ir abonando a esa deuda, el Gobernador Ángel Marcano, a través de la Comisión Piar, informó diversas iniciativas a fin de preservar ese heroísmo. Estas acciones las aplaudimos y exhortamos que continúen multiplicándose en pro del resguardo de esa memoria histórica y patrimonio cultural. Un fuerte abrazo Gobernador, éxitos.
Pero, “ahí les va”. Esa lucha por reivindicar a Manuel Piar, lleva años, toda esa historia no contada, hechos negados a conocer, hacían dudar tal heroísmo. Bravo, por los historiadores, a ese pueblo constante, leal, justo y por ese merecido reconocimiento a este insigne hombre que lo dio todo, en la tierra que lo acogió para ser el ilustre bolivarense.
Sin embargo, en ese tenor, lo invitamos a que se tomen en cuenta, restaure y vuelva a espacios que pueda disfrutar el público, las obras de arte en homenaje a Piar del artista plástico Regulo Pérez, incluyendo la que reposa en los depósitos de la Casa del Congreso de Angostura, entre otras obras plásticas, que están dañadas, al grado que no puedan ser restauradas y su valor patrimonial deje en cero la memoria de la cual nos sentimos orgullosos.
Gobernador, sabemos que usted no es culpable de nada de lo que hoy se manifiesta en este artículo, pero es justicia que con mazo en mano, imparta las instrucciones necesarias, para que no se siga perdiendo o destruyendo, el patrimonio cultural que tanto ha costado conservar.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *