Les compro la fe

Prof. Juan Vicente
Ramos

Con relación a los anuncios o propuestas de la llamada Cumbre Empresarial Biesur/Gobernación, evento realizado en Guasipati el pasado 1ero de Febrero, es un acto de demagogia solicitar la Construcción de la Autopista Upata/El Callao, un trayecto de más 100 km de longitud, por cuanto los guayaneses sabemos perfectamente que este gobierno no tiene la capacidad técnica, financiera, mucho menos presupuestaria para acometer un proyecto de esta magnitud.

Los venezolanos conocemos suficientemente que en estos 25 años de gobierno, el legado que ha quedado a lo largo y ancho del país es un cementerio de obras sin concluir, aún cuando existían suficientes recursos para llevarlas a felíz término, sin embargo la corrupción y el despilfarro de recursos impidieron que así fuera.

Los guayaneses, mucho menos los guasipatenses, no somos ingenuos y sabemos que detrás de estas propuestas hay otros intereses que pretenden ganar adeptos con fines politiqueros.
Es bueno recordarles a estos empresarios y a la opinión pública en general, que existen suficientes razones para dudar que estos anuncios se concreten. En Guasipati, por ejemplo por citar tres obras que este gobierno inició y quedaron sin concluir: Edificio del Centro Cívico, su construcción se inició en 2004, ubicada en el Sector Aeropuerto. Más de 20 años paralizada. Obra denomina Laguna de Oxidación, sector Los Carutos, 20 años de iniciada su construcción, hoy luce abandonada. Acueducto Puente Blanco Carretera El Callao/Guasipati más de 15 años sin «bombear» agua potable para ambas poblaciones. A todo esto, se le suma la incapacidad que tiene el gobierno para resolver el problema eléctrico, que es crónico en todos los municipios del Sur, ocasionando pérdidas a empresarios y vecinos en general. Así como las constantes fallas de Cantv e internet.

Con este gobierno, solo es posible «remendar» algunas estructuras oficiales y «tapar goteras», el resto es crear falsas expectativas a la población.

Por eso, como diría un viejo amigo, se me ocurre decirles a quienes pudieran estar pensando y formándose expectativas, creyendo que van a lograr que este gobierno va a ejecutar tan ambicioso proyecto (que no sea por tratarse de un año crucial, electoral), «Les compro la fe».

Juan Vicente Ramos

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