ESPINA BIFIDA UN DRAMA EN EL EMBARAZO CON SOLUCIÓN EN EL EMBARAZO

Saludos estimados lectores de #ELCONSULTORIO y @SOLOPARAPOLITICOS hoy estaremos en estas líneas escribiendo sobre una patología que afecta al desarrollo del feto durante su formación embrionaria y que en años anteriores hubiera sido impensable que primero tuviera curación, segundo en el útero durante la gestación y tercero que se pudiera realizar en nuestro país y eso está ocurriendo ya hace algún tiempo de la mano del @carlosbermudez #ginecobstetra y cirujano fetoscopia reconocido en el 2023 con el premio Nacional de Tecnología e Innovación y actualmente también con el grupo de trabajo del Hospital Domingo Luciani integrado por los colegas @juanperezwulf @danielmarquez es por eso que hoy leeremos sobre: ESPINA BÍFIDA
Comenzaré diciendo que en nuestra profesión como ginecoobstetra es fundamental el prepararte adecuadamente en realizar diagnósticos oportunos y precisos desde el punto de vista ecográfico en las diferentes etapas del crecimiento fetal y sobre todo en la llamada etapa embrionaria que abarca hasta las 12 semanas de gestación, una etapa donde ocurre todo el proceso formativo del nuevo ser por venir y donde la precisión del diagnóstico oportuno ayudará al diagnóstico oportuno de la afectación llamada Espina Bífida y que nos ocupa hoy, un diagnóstico que al momento de realizarse no estamos ni preparado para decirlo ni los padre preparados para escucharlo es por ello la gran responsabilidad que tenemos de ser muy profesionales tanto en nuestro diagnóstico como en la forma que lo comunicamos.
En el mundo nacen aproximadamente 700.000 niños al año con Defectos del Tubo Neural (DTN). La Espina Bífida, también conocida como Mielodisplasia, Raquisquisis, Meningocele, Mielomeningocele, etc., es una malformación congénita que consiste en la falta de fusión de uno o varios arcos vertebrales posteriores, con o sin protrusión o salida meníngea medular, y por donde el contenido del canal neural (o columna vertebral) queda expuesta al exterior. Se clasifica en:
1- ESPINA BÍFIDA OCULTA: Los arcos vertebrales no se fusionan y la lesión está cubierta de piel en toda su extensión.
2- ESPINA BÍFIDA ABIERTA: En la mayoría de los casos la lesión aparece recubierta por unas membranas en forma de quiste. Si este quiste contiene solamente meninges, la lesión se conoce como Meningocele. Si además está cubierta por un lipoma, se conoce como Lipomeningocele. En estos casos las secuelas son más leves. Si la lesión contiene meninges y médula, que es lo más frecuente, se conoce como Mielomeningocele, en este caso la afección es más grave, con variadas secuelas en el aparato locomotor, urinario y digestivo.
Las causas de la Espina Bífida no son conocidas en su totalidad, se relaciona con una causa multifactorial, entre los cuales están los siguientes factores: – Déficit de ÁCIDO FÓLICO en la madre previo al embarazo (uno de los más importantes). – consumo de ÁCIDO VALPRÓICO: medicamento para el tratamiento de la epilepsia. – ETRETINATO: fármaco utilizado para el tratamiento de la psoriasis y el acné. – GENÉTICA. – ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN SEXUAL: sífilis en el primer trimestre del embarazo. – DIABETES GESTACIONAL
Cómo puede realizarse los diagnósticos puede realizarse el cribado prenatal mediante ecografía fetal y determinación de las concentraciones séricas maternas de alfa-fetoproteína, idealmente entre las 16 y las 18 semanas de edad gestacional; los niveles de alfa-fetoproteína también pueden medirse en muestras de líquido amniótico si las pruebas previas sugieren un mayor riesgo. Las altas concentraciones indican mayor riesgo de espina bífida quística. Luego de realizarse el diagnóstico si este ocurre precozmente antes de las 26 semanas de gestación se puede realizar la corrección mediante cirugía fetoscópica (se realiza con el feto dentro del útero) y un neurocirujano en combinación con un cirujano obstetra fetoscopia realiza la cirugía de corrección de la columna vertebral del feto. En caso de realizarse el nacimiento del feto regularmente por cesárea y dependiendo del tipo de espina bífida el neurocirujano realizará la corrección del mismo.


Hay que destacar que esta afección trae consigo una serie de anomalías en el recién nacido que dependiendo del sitio de la lesión si es alta (área torácica) será de mayor complejidad tales como hidrocefalia, parálisis de miembros inferiores, hidronefrosis. Es importante destacar que tanto los padres como el recién nacido requerirá de mucho apoyo de personal especializado y el grupo familiar.
Debemos recordar que la prevención es un elemento importante en estas afecciones por ello la importancia del consumo de ácido fólico por los menos 3 meses previos al deseo de embarazarse y la notificación a su médico de confianza del consumo de medicamentos de forma prolongada cualquiera que este sea. Recuerda que la mejor forma de curar es la prevención. Gracias y hasta la próxima edición. Para cualquier comentario o tema de su interés lo puede realizar por el 04166852860 @drjosemerheb 2soloparapoliticos

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