Opinión

LA PAZ DE VENEZUELA, ES LA PAZ DE SURAMERICA

Estimados lectores, no hay duda de que a partir del 28 de Julio, nuestro país ha sido víctima de distintos tipos de agresiones por parte de sectores de la oposición fascista y el nazista, último nivel al que han mutado y que van dirigidas fundamentalmente al pueblo, en tanto siguen tirando la piedra y escondiendo la mano. Por esta razón, se ha venido advirtiendo sobre los distintos métodos y formas que ha utilizado este sector para derrocar el gobierno del Presidente Nicolás Maduro. También se ha venido diciendo que las redes sociales son un peligro real para la existencia del hombre y la mujer en su condición de libres, una verdadera amenaza de esclavitud. Importante es recordar que en los inicios de la Revolución Bolivariana, los sectores que luego devinieron fascistas, alegaban que el Gobierno chavista despojaría a las personas de sus propiedades. Chávez, no vino a otra cosa que a corregir la inmensa desigualdad de la Venezuela petrolera de fines del siglo XX. Cabe destacar que lo ocurrido en las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio, las grandes transnacionales de la comunicación, colocaron a sus servicios el poder de la dictadura de los algoritmos en las redes sociales, y lo hicieron con un desparpajo tal que pusieron al servicio toda la fiereza ilegitima de gobiernos de occidente, ordenados por los Estados Unidos. Todas las trasnacionales de la comunicación, con asiento en los Estados Unidos, se vinieron contra el país en las elecciones del pasado 28 de julio y apareció un personaje siniestro, representante del sionismo internacional llamado Elon Musk, amenazando a Venezuela y al presidente Nicolás Maduro. Más de 136 instituciones públicas y privadas fueron víctimas de ciberataques siendo su punto focal el sistema electoral, para impedir que se publicaran los resultados, fueron mas de 30 millones de ataques por minuto, una situación extremadamente grave, inédita en país alguno. El saldo de fallecidos por el llamado opositor de subvertir el orden, utilizando para ello ingentes recursos dinerarios y de todo tipo entregados a jóvenes y hasta niños para que salieran a quemar, saquear, destruir plazas, escuelas, hospitales y hasta asesinar. Fue tan certero el ataque contra la psiquis que no podemos olvidar el terrible caso de dos mujeres chavistas quienes fueron asesinadas solo porque las redes sociales decían que había que matar a los que apoyaban el Chavismo. Analizando el fascismo como fenómeno social, podemos concluir que éste no es otra cosa que una expresión política de la crisis del capitalismo. Cuando las élites se ven en riesgo, frente a la lucha de movimientos sociales que combaten situaciones de desigualdad, de las crisis económicas, emerge el fascismo como mecanismo psicológico vinculado a la psicología de masas, que luego va mutando hasta llegar a un grado superior como lo es el Nazismo. El fascismo, como lo hemos venido advirtiendo, por su evidente factor psicológico recurre a mecanismos de control mental a través de la propaganda y de otros elementos como el miedo, la alienación, la identificación de un enemigo al que hay que destruir y la amenaza constante a partir del principio de autodestrucción del que escribió el psicoanalista Sigmond Freud en 1922. Los dueños actuales de las redes sociales actúan a favor de que el hombre se convierta en un ser para la destrucción, el cerco, el odio, la mentira y la ausencia de solidaridad. En estos 25 años de Revolución no ha habido un solo día en que estos elementos y expresiones del fascismo no se hayan ensañado propiciando confrontación de hermanos contra hermanos. Sin embargo, el Gobierno bolivariano ha sido garante de la paz, pues nuestro pueblo ha sido víctima de las sanciones y del bloqueo económico que pidieron los grupos fascistas, amparados en el principio de autodestrucción Freudiano. Que no quepa duda que siempre que un hombre alce su voz contra el fascismo, hay una esperanza para la humanidad. En estos tiempos de revolución bolivariana, y muy especialmente en estos dos meses, hemos estado dando una batalla global contra el fascismo que los medios fácticos de comunicación promueven e impulsan mediante violencia, muerte y odio; a unos extremos que como seres humanos nos cuesta entender. Venezuela está clara que la paz del continente suramericano pasa por la paz de nuestro país, de allí que seguiremos apostando y tributando a agotar todos las iniciativas de diálogo con apego a lo consagrado en la normativa legal del Derecho Internacional y respeto a la autodeterminación de los pueblos, sin sometimientos, con la firme voluntad de seguir avanzando en el proyecto de país legado histórico del Libertador Simón Bolívar y del Comandante Hugo Chávez. Que nadie se equivoque. Hasta la próxima

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