EXHIBICIONISMO Y PODER CUIDADO!

Estimados lectores, a propósito del tema generacional, hay un tema que encendió nuestras alarmas al momento en que llegó vía correo, la denuncia de la madre de una jovencita, sobre la aberrada conducta de un conspicuo “caballero”, dícese un notable personaje de esta ciudad, que sin el menor pudor se atrevió a enviarle a su hija, una fotografía de sus genitales en todo su esplendor, sin que esta le diera motivo alguno, mas allá de un saludo a través de las redes, lo que motivó que la joven le diera un parao, por lo cual, el sujeto, se vió obligado a borrar tan aberrante fotografía.
Inmediatamente de conocer sobre la denuncia, nos propusimos iniciar ciertas investigaciones, no con el propósito de pretender ser especialistas en el tema, pero sí, como una forma de alertar sobre este fenómeno y sus consecuencias en la población, sobre todo la más jóven, el cual compartimos con todos nuestros lectores quienes semana a semana nos motivan a continuar avanzando en la generación de una CONCIENCIA CRITICA.
Hoy en día, el fenómeno de las redes sociales ha puesto en boga temas que hasta hace pocos años atrás eran no menos que tabúes ajustados a los convencionalismos sociales de la sociedad de esa época. En nuestros días ya es casi común escuchar a los jóvenes hablar sobre una palabra, hasta ahora poco conocida por el común de la población “vieja”, como suelen llamar los jóvenes a las personas en adultez, esta es la palabra “NUDE”; Pero qué son los “NUDES”?
El término “nudes’ significa en español “desnudos” aunque no necesariamente hace referencia a fotos que muestren una desnudez total, sino, más bien, íntimas.. Este fenómeno social desdibuja los límites entre lo público y lo privado.
Al enviar estas imágenes a cualquier persona, aunque sea de confianza, hay que tener en cuenta que todo lo que subimos a un dispositivo, por más que sea dentro de un chat, es susceptible de ser viralizado. No porque el receptor vaya a compartir la imagen sin consentimiento sino porque todo lo que está en internet es vulnerable”. Por otra parte, buscando conocer mas de cerca sobre el asunto, nos pusimos en contacto con jóvenes de distintas edades y distintos segmentos de la población, quizás unos mas que otros, hablan sin inhibiciones sobre este tema, igualmente hemos consultado alguna que otra literatura, que nos ha permitido ilustrarnos sobre el tema.
El exhibicionismo consiste en la exposición de los genitales para excitarse sexualmente o en la existencia de un fuerte deseo de ser observado por otras personas durante la actividad sexual.
La mayoría de los exhibicionistas no presentan trastorno exhibicionista.
Los médicos diagnostican un trastorno exhibicionista cuando las personas se sienten muy afligidas o son menos capaces de funcionar bien debido a su comportamiento, o han actuado según sus impulsos con una persona que no ha dado su consentimiento. En el caso que nos ocupa, no creemos que el ilustre exhibicionista encuadre en esta teoría, ya que su conducta pudiera responder a la presunción de “enfermedad del poder” de sentirse superior a los demás por razones del “cargo”, por lo cual pudiera estar creyendo que es merecedor de todo cuánto se le ocurra.
Por otra parte, el exhibicionismo es una forma de parafilia, cuyo significado deviene de anormal, defectuoso, incorrecto, al margen de, inadmisible, impropio, inclinación excesiva o exagerada, atracción sexual enfermiza o incontrolable, anteriormente conocida como perversión sexual y desviación sexual.
En tanto que los exhibicionistas (por lo general de sexo masculino), exponen sus genitales a personas desconocidas y que están desprevenidas, obteniendo así excitación sexual. Pueden ser conscientes de su necesidad de sorprender, impactar o impresionar al observador. La víctima es casi siempre una mujer o un niño de uno u otro sexo.
Aproximadamente el 30% de los delincuentes sexuales masculinos detenidos son exhibicionistas. Tienden a perpetuar en el tiempo este tipo de conducta. Entre el 20 y el 50% son detenidos más de una vez.
Importante destacar que la exposición de los genitales a desconocidos desprevenidos con el objeto de excitarse sexualmente es poco frecuente en las mujeres. Ellas cuentan con otros medios para exponerse, como vestir prendas provocativas (que se aceptan cada vez más como algo normal)
Enfermedad o no, es hora de parar esta aberración, la realidad nos dice que hay tanta perdida de los valores familiares que personas como este “decentísimo” personaje decidió unirse a la moda de utilizar sus “encantos” a través de esta técnica que quien la práctica, no puede menos que catalogarse de Aberrado.
El arma con la que se cuenta es el alerta a tiempo y campañas de concienciación dirigida a nuestros jóvenes, no podemos seguir romantizando lo anormal por encima de lo normal; hay que romper el silencio, mientras tanto, sepa él y los exhibicionistas con poder, cuya conducta responde a una moda, mas que a una enfermedad, que los estamos observando. Quiera Dios no tengamos que llegar a mostrar sus rostros… Hasta la próxima!

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