No Puede Haber Paz y Justicia, Sino Acabamos Con La Impunidad
En el golpe de timón de esta semana…
Entre los manifestantes que salieron a las calles, había un elenco de personajes muy interesantes, los personeros de los manipuladores, que, armados con billetes en efectivo $$$, armas de alto calibre, drogas de todo tipo aprovechándose del escenario electoral, quedaron en evidencia que su misión fundamental era incitar el caos generalizados por un supuesto fraude en estos comicios presidenciales 2024, estos infiltrados apátridas cual ratas de cañería, con el respeto a las ratas, se mezclaron con la multitud manipulada, como si fueran actores en una obra de teatro, esperando el momento perfecto para desatar la violencia, justo después de una victoria legitimada por el Poder Electoral, en medio de la confusión y el caos, comenzaron a quemar y destruir todo a su paso, sin preocuparse por las consecuencias, porque, claro, ¿quién necesita pensar cuando puedes actuar?
Lo trágico de esta situación es que muchos de los que salieron a protestar, impulsados por un legítimo deseo de cambio, se convirtieron en víctimas de los mismos manipuladores que los habían incitado, negocios que habían sido construidos con esfuerzo y sacrificio fueron destruidos en un instante, como si fueran castillos de naipes en medio de un huracán, la ira que habían canalizado hacia el gobierno revolucionario se volvió contra ellos mismos, dejando a muchos en la ruina, porque, al final del día, ¿quién necesita un plan cuando puedes dejarte llevar por la emoción del momento, los manifestantes, que inicialmente buscaban expresar su descontento en protestas supuestamente pacíficas, aunque totalmente manipulados, se encontraron en medio de un escenario caótico, como si estuvieran en una película de acción de bajo presupuesto, con la complicidad de actores imperiales que tienen sus garras bien aferradas a todos los recursos de la bendita patria venezolana, en este festín de odio y manipulación, las emociones se convirtieron en armas de doble filo, aquellos que habían sido víctimas de la desinformación, la propaganda sucia, los falsos positivos, los Fake News se dieron cuenta, demasiado tarde, de que habían sido utilizados como peones en un juego geopolitico imperial mucho más grande, donde sus esperanzas de cambio se transformaron en desesperación y pérdida, como si fueran piezas de un rompecabezas que nunca encajaban, la historia se convirtió en una amarga lección sobre el poder de la manipulación y cómo el odio puede llevar a la autodestrucción, en su búsqueda de justicia, muchos terminaron sufriendo las consecuencias de un conflicto que no habían provocado, recordando que la lucha por la verdad y la justicia debe ir acompañada de discernimiento y cuidado, porque, al final, no queremos convertirnos en víctimas de quienes buscan aprovecharse del caos para aplicar un golpe de estado de nueva generación, que es cibernético, terrorista y fascista, contra la voluntad del heroico pueblo venezolano. ¡Qué ironía, verdad luchar por la libertad y terminar atrapados en una red de desinformación!
Mientras tanto, nosotros, los «cuerdos», cumplamos con la instrucción que nos recomendó el Presidente constitucional Nicolás Maduro Moros reelecto para el periodo 2025-2031, gracias a la voluntad del pueblo soberano, porque, claro, el Poder Electoral, en su brillante cumplimiento de su papel es el único órgano legítimo y legal para organizar las elecciones en Venezuela, no ese grupo fascista y violento que tiene la osadía de intentar un golpe de estado cibernético, el presidente nos dijo que en situaciones complejas como esta, debemos tener calma y cordura, nervios de acero, y retomar el hilo constitucional porque nosotros somos amantes de la paz y para que exista la paz debe haber justicia, y para que tengamos justicia no puede haber impunidad , y en paz es como vamos a salir adelante, en paz y unidos, como el pueblo bolivariano y chavista que somos, la lucha por la justicia y la verdad no debe ser un mero eco de consignas vacías, sino un compromiso genuino con el bienestar de nuestra patria, en este complejo entramado de intereses, donde cada paso puede ser un cuchillo doble filo, el verdadero desafío será encontrar el equilibrio entre la paz y la resistencia, al final, solo el tiempo dirá si lograremos salir adelante.
Me despido con este golpe de timón justo y necesario para nuestra revolución.
Hasta la victoria siempre…
Jesús Linarez Comunicador Alternativo y Generador de Contenidos.