UDO Bolívar, en peligro de extinción
Día de la Juventud ¿ Pero sin UDO? Es la incógnita que tiene cada joven bolivarense.
Hoy se cumplen 208 años de la Batalla de la Victoria, fecha que en Venezuela conmemoramos el día de la Juventud, y que en cualquier otro escenario este día hubiese sido un día de Celebración inolvidable, debido a que por primera vez, en mucho tiempo en las pasadas elecciones llevamos una gran maqueta de jóvenes a los distintos cargos de elección popular, donde la gran mayoría de estos quedo electos.
Pero entonces, ¿Por qué no es un día de celebración? Y esto tiene una respuesta clara, y es que en la capital bolívarense y extendiéndonos un poco por el Oriente del país no hay nada que celebrar ya que nuestra UDO está en completas ruinas, sin embargo considero que si hay mucho por hacer, expresó Gregori Sequera.
Cabe destacar que esta casa de estudios no sólo es la promotora de grandes generaciones de hombres y mujeres que allí se forman, sino que es un bastión fundamental para las luchas estudiantiles que se han desarrollado a lo largo del tiempo y que además era uno de los pocos espacios de democracia y pluralidad donde los jóvenes tenían la oportunidad de tener una alma mater consolidada bajo los pilares fundamentales de la democracia.
Asimismo Sequera resaltó que tal dia como hoy «más de 1500 jóvenes se unieron al batallón y marcharon a la Victoria de la mano Jose Félix Rivas y Vicente Campos Elías el 12 de febrero de 1814, haciendo esa cruzada tan significativa y referencia de una juventud aguerrida y que tiene que seguir siendo referencia de ejemplo para la juventud que viene detrás.
Sin embargo Sequera lamentó que «en Ciudad Bolívar para este día no contaban con nuestra casa de estudio la más alta del Oriente donde nuestra Unidad de Cursos Básicos Campus San Rafael y la valiosa Escuela de Ciencias de la Tierra se encuentran en proceso de desaparición recinto que formó los mejores ingenieros y médicos de Venezuela que hoy dan ejemplo en el mundo dejando en alto nuestra UDO núcleo Bolívar».
Gregorio Sequera