Toda la economía en el estado se beneficiará de los resultados positivos en la lucha contra la fiebre aftosa

CNP 12.355.- Cuando se habla de fiebre aftosa, la conversación a menudo se centra en el impacto directo sobre el ganado y la producción ganadera. Sin embargo, la realidad es que el estatus de un país como zona libre de esta enfermedad viral contagiosa es un pilar fundamental para el desarrollo económico y la competitividad en múltiples sectores, mucho más allá del agropecuario.
Como lo expresó el presidente de Feproagro Bolívar, Pedro Díaz, «un enfoque que nada más que los ganaderos se van a beneficiar no es el correcto, al final, todos nos vamos a beneficiar». Este mensaje es clave, ya que la certificación de zonas libres de fiebre aftosa no solo protege la producción de animales y garantiza la salud pública y la seguridad alimentaria, sino que también desata una ola de oportunidades para toda la cadena productiva.
Díaz indica que lograr y mantener el estatus de zona libre de fiebre aftosa es un proyecto de país que beneficia a una gran variedad de actores económicos. No es solo un logro para los ganaderos, sino también para el ferretero que provee los materiales de construcción, el veterinario que ofrece sus servicios, y el hotelero que recibe a los inversionistas que vendrán a explorar el potencial de la región.
Este estatus sanitario abre la puerta a nuevas inversiones. Los frigoríficos se activarán para procesar la carne, y la inversión en un puerto de aguas profundas será necesaria para el embarque y la exportación de animales. Esto conlleva la creación de una infraestructura robusta que fortalece la economía de manera global, creando un «día después» lleno de posibilidades y crecimiento.
Según la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), una zona libre de fiebre aftosa es un país, región o compartimento reconocido oficialmente por estar libre de la enfermedad. Este estatus se logra mediante el cumplimiento de estrictas medidas de bioseguridad y vigilancia para prevenir la reintroducción del virus.
“La OMSA clasifica estas zonas en dos categorías principales: Libre de fiebre aftosa sin vacunación, este es el estatus sanitario más alto, que se logra sin la necesidad de vacunar al ganado y libre de fiebre aftosa con vacunación en el cual se reconocen zonas que, a pesar de aplicar la vacunación, han demostrado la ausencia de infección y no han detectado la transmisión del virus durante un período determinado”, finalizó diciendo.
