LAS LANZAS PERO DE BREDA
Hay uno de los tantos cuadros de Diego Velásquez conocido como “Las Lanzas” o también como la “Rendición de Breda”. Este óleo sobre lienzo que se encuentra en el museo del Prado en Madrid, y retrata un momento histórico en la llamada Guerra de los Ochenta años, en que los Países Bajos luchaban por independizarse de España. La referida ciudad se encontraba tomada por los neerlandeses desde 1590 y así se mantuvo por espacio de 12 años hasta que Felipe IV asciende al trono de España en 1621 y expira la tregua, por lo que se propone recuperar tan importante plaza, para dicha misión nombra a su mejor estratega el Genovés Ambrosio de Spinola quien al mando de 40 mil hombres emprende la reconquista. La ciudad se encontraba defendida por Justino de Nassau de la casa Orange y el cerco y sitio de la ciudad fue una lección de estrategia militar que aun se estudia en las academias. Fue tan importante que numerosos generales de varias naciones acudieron en calidad de lo que hoy se conoce como “agregados Militares” para estudiar la táctica y estrategia de Spinola. La principal misión del asedio se encontraba en impedir que llegasen a la ciudad víveres y municiones para lo cual se llegó incluso a inundar los terrenos aledaños para impedir el paso. Cuenta la historia que fue una resistencia heroica de más de nueve meses hasta que el 5 de Junio de 1625 se rinden y levantan bandera. El reconocimiento al valor de los defensores de la ciudad permitió que salieran en correcta formación y con sus banderas al frente, privilegio escasamente visto, sólo cuando el vencedor reconoce la hidalguía y valentía de sus adversarios y los premia con un trato digno y respetuoso. La obra de Velásquez trata de imaginar la reunión entre Nassau y Spinola en la cual el primero con las llaves de la ciudad en la mano intenta arrodillarse ante el vencedor, quien le pone la mano en el hombro impidiendo la humillación. Lo más resaltante aparte de la escena principal está en la cantidad de lanzas que decoran el cuadro y para mí, el enorme afán de protagonismo del pintor, que siempre retrata alguien con su parecido físico, como lo es el soldado de uniforme verde con la carabina en el hombro, esto es sólo una apreciación personal tratando de sicoanalizar a este maestro de la pintura universal. Y ustedes se preguntarán a que viene esta narración, la misma es parte de mis elucubraciones con el principal tema que es la situación de mi querida Venezuela. Estamos como en Breda, rodeados y asediados, lo que era una mera sugerencia ahora se transformó en una orden categórica, se encuentra cerrado todo nuestro espacio aéreo, tenemos un bloqueo marítimo y limitado el acceso terrestre, el operativo que nos amenaza es llamado “Lanza del Sur” y de parte de los amenazados no existe real intención de defenderse pese a los vuelos de prueba muy lejos de la zona de conflicto. La mayoría de la población se mantiene expectante tratando de seguir con su rutina doméstica y atentos a la lluvia de información que llega en todas las direcciones. El conflicto no ha logrado despertar la vena patriótica que debería, no hay voluntarios tocando las puertas de los cuarteles para la defensa de la patria, será porque se sienten ajenos a la disputa y ha logrado calar la versión que la amenaza no es contra el país ni el gobierno, sino contra un grupo perfectamente identificado. ¿Me pregunto si aún no es tiempo como el de Nassau para salir con las banderas al frente y una digna claudicación? Las llamadas entre los protagonistas parecen presumir esta vía. Recuerden que hay enemigos que no respetan rendiciones, ni porque las imploren ante las cámaras de televisión, de esas escenas tenemos aun memoria. Seguiremos conversando. Claudiozamora06@gmail.com
